ª “Las
propias Naciones
Unidas reconocieron en este último
año al
gobierno de Bashar como legítimo, siendo
elegido democráticamente y es merecedor, sobre todo en su lucha contra el
terrorismo, del respeto de todos los países del mundo”.
ª “Los niños de corta edad no conocen otra realidad que esta crisis.
En el caso de los adolescentes que inician la etapa formativa de sus vidas, la
violencia y el sufrimiento comienzan a definir su futuro”.
ª “Sorprende la noticia de que en los próximos
años Alemania estará necesitada de numerosa mano de obra barata para aumentar su producción industrial”.
Vamos a
centrar toda la atención en la actual comprometida y difícil situación de Siria. Analicemos el
contexto de cómo empezó todo, su desarrollo y el momento actual que vive el
país, pero sobre todo la población civil.
Ayer mismo, el presidente de
este país Bashar Al-Asad en una entrevista
ofrecida en los medios de comunicación, acusaba a los países
occidentales y a Estados Unidos de apoyar a los terroristas en la guerra Siria.
Asad dijo también que la crisis de refugiados (más de cuatro millones de
sirios abandonaron el país y varios millones más fueron desplazados
internamente, de acuerdo con datos de Naciones Unidas), se debe al "terrorismo". Assad pidió a los
países occidentales que "dejen de apoyar a
terroristas" si están preocupados sobre el flujo de refugiados.
Recordemos que el actual
líder de Siria fue elegido por referéndum democrático ganando las elecciones en
el 2000, 2007 y recientemente en
el año 2014, y que las propias Naciones Unidas reconocieron en este último año
al “…gobierno de Bashar como legítimo,
siendo elegido democráticamente y es merecedor, sobre todo en su lucha contra
el terrorismo, del respeto de todos los países del mundo”.
En marzo de 2011, los opositores
al gobierno del Presidente Bashar al Assad intentaron tomar el
poder mediante la transgresión al orden constitucional mediante el empleo de
acciones violentas, afectando como no podía ser de otro modo a civiles, entre
ellos sobre todo a la población
infantil.
El año 2011 representó para toda la región
árabe el inicio de un período que condujo a revoluciones y levantamientos
civiles que culminaron con el derrocamiento de las dictaduras de Egipto, Túnez, Libia y el agravamiento de la
violencia en países como Yemen. A este conjunto de manifestaciones populares y
políticas se las denominó, Primavera
Árabe.
Lo que en un
principio se vislumbró como un movimiento civil, poco a poco se convirtió en un
cuerpo armado integrado por diversos grupos, con el fin último de la deposición
de su líder nacional. De este modo grupos como Al Qaeda, activistas en derechos humanos, islamistas moderados y
nacionalistas, además de soldados desertores de las fuerzas y cuerpos del
Estado Sirio se unieron al denominado “Ejército
Sirio Libre”.
En 2013, el autodenominado Estado Islámico se une a
estos grupos y toma el control de los mismos y de la oposición al régimen
nacional.
Desde ese
momento, los enfrentamientos se han encrudecido en una guerra de bloques donde
cada uno de los bandos es apoyado por fuerzas externas y del que parece no
tener un final próximo. Desde el origen de las hostilidades entre rebeldes y
cuerpos de seguridad, los datos sobre dignificados arrojan las cifras de 220.000 las víctimas (sobre todo civiles), 11 millones de desplazados, 4 millones de
refugiados y más de 12 millones de personas dependientes de la ayuda
humanitaria. No olvidar el actual éxodo de refugiados que se juegan la vida
cruzando las fronteras y el mar Mediterráneo en busca de un lugar donde la
guerra no les persiga, que son reconocidos como “inmigrantes económicos” y tratados peor que animales.
Mientras que
el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó
en 2013 y 2014 resoluciones que daban un alivio a millones de sirios
mejorando el acceso humanitario, los países miembros de este órgano insuflaban
y lo siguen haciendo, con armas a las distintas partes. Concretamente el 90% de las armas que se utilizan en el conflicto
han sido manufacturadas en países miembros del Consejo de Seguridad,
especialmente Rusia y Estados Unidos.
Para ser más
exactos, el propio Presidente Estadounidense, Barack Obama justificó la idea
de suministrar armas a las bandas terroristas sirias tras dar a conocer, sin
prueba alguna al respecto, que el gobierno legítimo de Bashar Al Assad había
usado armas químicas contra mercenarios y la población civil. ¿No recuerda esta noticia a otra parecida de
unos años atrás con Bush Junior y las resoluciones de la ONU en contra de la
entrada en Irak, debido a la existencia de armas de destrucción masiva?
En abril de 2013, los jefes
de los principales organismos de la ONU pidieron “la
actuación inmediata en el conflicto sirio”. Los responsables de ACNUR, UNICEF, la OMS (Organización Mundial De La Salud), PMA el Programa Mundial De Alimentos y OCHA (Oficina De
Coordinación De Asuntos Humanitarios) denunciaron la inacción por parte de
los políticos de todo el mundo para acabar con la guerra. Los responsables
firmantes de este comunicado fueron:
·
Valerie Amos, Coordinadora de OCHA.
·
Ertharin Cousin, Directora Ejecutiva de
PMA.
·
Antonio Guterres, Comisionado de ACNUR.
·
Anthony Lake, Director Ejecutivo de UNICEF.
·
Margaret Chan, Directora General de la
OMS.
Insisten en
que “en esta ocasión no se pedían fondos
ni más recursos pese a que eran ya de por sí necesarios”. Sus palabras
fueron dirigidas a todos los involucrados de este conflicto brutal y a los
gobiernos que pueden influir en ellos. A grito de ¡Basta!, ejecutan un llamamiento para salvar al pueblo sirio.
El pasado 31 de marzo de 2015, tuvo lugar en
Kuwait la Tercera
Conferencia Humanitaria Internacional de Donantes para Siria. La cumbre
tuvo como objetivo recaudar fondos necesarios para satisfacer las necesidades
expuestas en el Plan
De Respuesta Estratégico Para Siria 2015 (SRP) y el Plan
Regional Para Los Refugiados Y De Resiliencia 2015-2016 (3RP).
Según estos
planes, la FAO (Organización UN para la Alimentación)
busca 59 millones de dólares para
desarrollar su labor en Siria y apoyar la producción de alimentos básicos,
mejorar la nutrición y los ingresos de las familias, proteger el ganado y
mejorar la coordinación entre gobiernos y organismos de ayuda humanitaria.
El Consejo De Seguridad De Las Naciones Unidas (CSNU)
aprobó el lunes 17 de Agosto de 2015,
por unanimidad un nuevo Plan de paz para
Siria. El plan consta de 16 puntos y
exige a todas las partes involucradas trabajar de forma conjunta para poner fin
a la crisis del país Árabe. Por primera vez un plan para una nación de esta
región cuenta con el consenso de todos los miembros (15 del CSNU) incluidos los integrantes permanentes con derecho a
veto (EEUU, Rusia, China, Francia y Reino
Unido).
UNICEF comunicó el 12
de marzo de 2015, basándose en investigaciones e informes desarrollados en
el terreno: “Casi dos millones de niños
sirios se encuentran refugiados en el Líbano, Turquía, Jordania y varios países
más. A ellos se suman 3,6 millones de niños de las comunidades vulnerables en
las que se albergan otros refugiados”. Los niños de corta edad no conocen otra realidad que esta crisis.
En el caso de los adolescentes que inician la etapa formativa de sus vidas, la
violencia y el sufrimiento comienzan a definir su futuro.
Se echan en falta
las intervenciones o al menos los comunicados de apoyo de entidades tan
importantes como el FMI (Fondo Monetario Internacional), el BM (Banco Mundial) y el BCM
(Banco Central Europeo), tan solo
preocupados por cómo esta crisis en el país árabe puede afectar a la economía
mundial. El FMI, institución creada
con el objetivo de “fomentar la
cooperación monetaria internacional, afianzar la estabilidad financiera,
facilitar el comercio internacional, promover el empleo elevado y un
crecimiento económico sostenible y reducir
la pobreza en el mundo entero”. ¿Nadie le pide cuentas?
Otras entidades que colaboran de forma activa en el
conflicto de Siria son las Agencias Estatales de Cooperación Internacional. Las entidades privadas sin ánimo
de lucro. Como por ejemplo: Intermón Oxfam, Médicos
Sin Fronteras, Médicos del Mundo, MPDL (Movimiento por la Paz), Acción contra el Hambre, Save
the Children. El SPCR (Centro Sirio de Investigaciones Políticas)
que realiza informes anuales sobre la situación y que son entregados a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados en Oriente Medio (UNRWA, por sus siglas en inglés) y el Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD).
Sinceramente, parece que con los acontecimientos
recientes, se están tomando cartas en el asunto, pero ¿Es necesario llegar al sufrimiento extremo de un pueblo para empezar a
trabajar por y para el cambio?, el trabajo de organismos tan importantes
para la defensa del ser humano como es la ONU ¿Realmente sirve para su cometido?, o como se viene viendo en
conflictos como Ruanda, Balcanes, Palestina… da la impresión de que siempre
llega (cuando lo hace) mal y tarde. ¿Es
necesaria una reconstrucción de estos organismos y su funcionamiento para que
realmente tengan peso en la sociedad mundial y presten la ayuda que necesitan los
pueblos? Mi opinión es que así
debe de ser, y
debemos involucrarnos más en que se produzca este cambio.
Mientras tanto el problema aumenta cada día. Miles de
ciudadanos sirios abandonan su país en busca de paz y libertad. Llegan como
pueden al viejo continente e intentan cruzarlo con lo poco que llevan encima,
caminado en muchos casos cientos de kilómetros. Los gobiernos de nuestros Estados
Europeos siguen sin apenas mover un dedo, el mismo 15 de septiembre han vuelto a dar la espalda a estas personas.
La Unión Europea vuelve a fracasar en la ayuda y reparto de refugiados. Mientras tanto
nuestro Ministro de Interior (Jorge Fernández Díaz) insiste en el reforzamiento de fronteras, políticas de
repatriación efectivas y refuerzo del papel del FRONTEX.
No todo acaba aquí, no solo encuentran soledad e
incomprensión al llegar a la vieja Europa. Además (como muestran los medios a través de imágenes y artículos) deben
de soportar la instalación de miles de kilómetros de vallas y
concertinas nuevas
para evitar su entrada a través de las diferentes fronteras, la humillación de patadas
e insultos en los diferentes
países por los que transitan (incluso de
los propios periodistas como bien se ha visto), la negación
de ayuda de los países balcánicos que
lejos de hacer memoria, han olvidado que hace veinte años eran ellos mismo los
que buscaban asilo en otros lugares para sobrevivir.
Con todo, miles de seres humanos solidarios se vuelcan
en el rescate y ayuda de estas personas. No cesan las peticiones de ayuntamientos que requieren sean tenidas en
cuenta como lugares de asilo, de personas particulares a las que no les importaría
acoger en sus propias casas a una familia
entera. Acciones que te hacen pensar y valorar que aún existen personas
comprometidas con el mundo y que te devuelven la esperanza. Pero esto no es suficiente, se debe
de presionar
a los Estados y a sus líderes para que intervengan de una vez, son ellos quienes tienen el poder y las
herramientas además de los recursos para atajar el problema de raíz.
Ciudadanos de Europa… tengamos presente que no habrá
valla, concertina ni muro alto que detenga la marcha masiva de ciudadanos
sirios. Huyen de la propia muerte, cargan
a sus espaldas el dolor de una guerra que no comprenden y de la cual son víctimas
sin formar parte de ella. Hagamos el pequeño gesto de mirarnos al espejo fijamente
y decirnos a nosotros mismos que no tenemos nada que ver con todo esto, que en la
guerra de Siria, los países occidentales (ciudadanos
incluidos ya que somos los primeros en mirar hacia otro lado) somos los máximos
responsables debido a nuestros intereses personales, energéticos y
geo-estratégicos. Incluso ahora mismo, parece que tan solo miramos por nuestro interés. Sorprende
la noticia de que en los próximos años Alemania
estará necesitada de numerosa mano de obra barata para aumentar su
producción industrial… ¿coincide este hecho
con la presente acogida de 800.000 refugiados en su país?
Aún hay algo que me sorprende más, sabemos que Estados
Unidos tiene firmes intereses en la
zona, hasta el punto de que apoya a los grupos contrarios al gobierno de
Bashar Al-Asad en Siria, que no olvidemos son denominados “terroristas”. Incluso, aunque las Naciones
Unidas lo denominan como “Estado Legítimo y democrático”, la política
estadounidense se empeña en derrocar al líder sirio. Lo que aún no me explico es porque
nadie habla del número de refugiados sirios que este país está dispuesto a llevar
hasta su país (tan solo 1500 en este
año). Es fácil hacer la guerra a favor de tus intereses lejos de tus
fronteras, y que las responsabilidades caigan sobre las espaldas de los demás. Dos
últimas preguntas… ¿alguien recuerda algún
conflicto protagonizado por EEUU dentro de sus propios límites geográficos?
¿Alguna vez (pese a no vencer) alguien
cree verdaderamente que no consiguieron sus objetivos?
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